Buscando un millón de votos

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Confunde el ministerio del Interior cuando dice que las actas que les llegaron a ellos contenían inconsistencias (se hizo famoso el término “descuadratura»), cuando en verdad, al ministerio no llega ningún acta, los datos son transmitidos desde el local de votación, y deben ser completamente ingresados.

El domingo pasado, cuando llegamos a la mesa de votación, se nos entregaron 2 cédulas, una para alcaldes otra para concejales, las cuales  después de marcar la preferencia debíamos depositar una en cada urna. No se necesita ser un gran matemático para concluir que al final del día debe existir la misma cantidad de votos en cada urna, esto es, igual cantidad de votos para alcaldes que para concejales.

En el último informe que se puede consultar en el sitio web www.elecciones.gob.cl, el cual fue leído al país por el subsecretario Ubilla dice: votos para alcaldes 5.495.929, votos para concejales 4.422.925, diferencia 1.073.004. Diferencia suficiente para generar un escándalo de proporciones, el cual ya está con protestas, solicitudes de nulidad, amenazas de demanda, etc.

Como yo he sostenido que esto se debe en gran parte a falta de cultura cívica, y sin el ánimo de justificar, ni mucho menos culpar a alguien, quisiera explicar algunas cosas.

En los escrutinios que se realizan en la misma mesa donde se efectuó la votación (no se puede hacer en otro lugar), se levantan 3 actas con los resultados, generalmente es un original y 2 copias, por lo tanto, las tres contienen la misma información.

Estas actas tienen  diversos destinos. Una se despacha por correo al Tribunal Calificador de Elecciones; la segunda al Colegio Escrutador; y la tercera, que es la que tendremos que analizar con mayor detención,  al encargado electoral del local de votación. Este encargado electoral procederá a la mayor brevedad a ingresar los datos a la base del Servel, para que éstos sean conocidos por la ciudadanía,  medios de comunicación, partidos políticos, entre otros.

La ley indica que esta tercer acta debe ser entregada antes de iniciarse el escrutinio siguiente (Inciso 6  Art. 72 de la Ley 18.700). Por tanto, como primero se hace el escrutinio de alcaldes, el desfase entre el primer y segundo escrutinio puede ser superior a una hora o más, dado que con mayor número de candidatos, el conteo se hace más lento. De esta manera, cuando se está dando un resultado con casi el 100% de los votos para alcaldes, los de concejales llegan apenas al 77%. He ahí la diferencia: falta un 23% de los votos de concejales.

Los errores son obviamente comunicacionales, pues el  Servel, a través del Ministerio del Interior, debió ser claro al entregar ésta información. La ciudadanía debiera tener claro que los resultados entregados por el Ministerio del Interior son meramente informativos y no constituyen escrutinio para ningún efecto legal (Art 175 bis, Ley 18.700).

Confunde el Ministerio del Interior cuando dice que las actas que les llegaron a ellos contenían inconsistencias (se hizo famoso el término “descuadratura»), cuando en verdad, al Ministerio no llega ningún  acta, los datos son transmitidos desde el local de votación y deben ser completamente ingresados.

El  único escrutinio válido es el practicado por el Colegio Escrutador con la información obtenida de la segunda acta y teniendo en vista lo obtenido de la tercera, que ya está en las bases del Servel, por lo tanto, con información  cruzada.

Lamentablemente, hemos visto a candidatos, dirigentes políticos, periodistas, y muchos más, reclamando contra una información (la entregada por el subsecretario Ubilla y Servel ) que no tiene validez  legal alguna como escrutinio. Desde el año 1973 que en nuestro país se dejó de impartir asignaturas de educación cívica en los colegios. Hoy la necesitamos todos y con urgencia.

¿Deberían ser iguales la cantidad de votos de alcaldes y concejales? La respuesta debiera ser sí, hasta la elección de 2008, porque la del domingo pasado era voluntaria, por lo tanto yo podría haber solicitado solo el voto  para alcaldes y no el de concejales. Por algo es voto voluntario. Pero no hay reportes de se haya dado un caso de esa naturaleza,  pero si  debemos tener presente que los conteos de votos los hacen personas, y muchas personas en distintas partes del país y con un variado  nivel cultural por lo que, de todas maneras lleva a la existencia de errores. Obvio que nunca del tamaño de un millón de votos.

Un ejemplo es la misma elección de alcaldes del año 2008. En esa ocasión votaron para elegir alcaldes 6.959.075 personas y para concejales 6.950.508, y ahí debió ser igual porque el voto era obligatorio.  El año 2009 se  realizan las elecciones  presidenciales junto con las parlamentarias, por lo que los votos para presidente, en primera vuelta, debieran ser iguales a los de diputados, pero ocurre que para presidente votan 7.264.136 y para diputados 7.263.537.

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Foto: Emol