#Medio Ambiente

Mascotas en llamas, el debate pendiente

0 |
COMPARTIR
EN WHATSAPP
COMPARTIR
EN WHATSAPP

Esta matriz argumental, que comparten muchas otras personas por ser educadas bajo tal paradigma, separa al ser humano de la naturaleza, sin llegar a comprender que no solo somos parte de ella sino que nos necesitamos mutuamente. Es la ética de la vida, donde todos los seres vivos y ecosistemas tienen un lugar.

Hace pocos días llamó mi atención un artículo que nos notificaba que Francia está avanzando en su legislación civil para reconocer a los animales como “seres vivos y sensibles”, algo que ya ocurría en sus normativas rural y penal. El país europeo decide de esta forma caminar hacia un estado más evolucionado con respecto a la relación que debe existir entre el ser humano y las otras especies del reino animal.

La opción gala abre una brecha con la mayoría de las leyes vigentes a nivel global y particularmente con nuestro país, donde este tema ha sido planteado desde hace tiempo por diversos movimientos ciudadanos y académicos.

El Código Penal chileno sanciona al que “cometiere actos de maltrato o crueldad con animales” (artículo 291 bis), sin embargo la norma civil clasifica a estos, en el acápite relativo a los bienes, como “cosas” del tipo “corporales muebles” (artículo 566). O más específicamente semovientes, que es el término utilizado por cierta corriente del derecho para definir las cosas que se mueven por sí mismas.

Lo primero que recordé al leer el artículo sobre Francia fue el posteo del escritor nacional Rafael Gumucio señalando que “algunos hipster fueron a salvar gatitos y perros mientras Valparaíso ardía y miles de sus compatriotas luchaban por sus vidas #verguenzaajena». Y también, asociado a lo anterior, la furia que desató entre personas que se autodefinen como animalistas, quienes las emprendieron con insultos y amenazas contra él y su familia. Imposible me es incluir el link original dado que al escribir estas líneas se ha informado que el reconocido autor ha cerrado su cuenta de Twitter producto de la reacción a sus comentarios.

La discusión sobre los derechos de los animales no es nueva. Cruza la historia del derecho y ya Francisco de Asís, el que optó por los vulnerables, les llamaba sus hermanos menores, algo que más allá de la anécdota representa un símbolo de los giros en un debate siempre abierto. No por nada el obispo Jorge Mario Bergoglio eligió al santo como figura señera de su pontificado, a quien para un no creyente como yo, más que por su fe, se le reconoce por su compromiso con la humanidad y la vida. Leonardo Boff es un gran ejemplo de esta mirada.

No es la primera vez que Rafael Gumucio expresa su escepticismo sobre materias relacionadas con la naturaleza, los ecosistemas y quienes tienen una alta preocupación por la biodiversidad. Lo hemos sabido constantemente en Aysén cuando ha lanzado frases del tipo “la casita con jardín es más contaminante que Hidroaysen” (7/6/2012), “me pasa algo terrible pero creo cada vez mas que Hidroaysen es necesario” (24/7/2012) y “me da lo mismo centrales de paso o Hidroaysen. Me resulta raro despreciar la hidroelectricidad solo porque es posible” (31/8/2012).

Personalmente también lo percibí cuando junto a Patricio Fernández me entrevistó en Radio Zero por los días de la aprobación del proyecto hidroeléctrico, en mayo de 2011, y sentí ese tono descreído de cierto red set nacional que en algún momento tuvo ideales (en su caso no estoy tan claro si él o sus ascendientes), pero que en la hora presente “duda de la pureza de los que protestan”, como él mismo expresara en una columna del 10 de mayo de 2011.

Pero más allá de concentrar estas líneas en la persona de Rafael Gumucio, reconocido escritor del concierto nacional, mi interés no pasa particularmente por saber cómo piensa o por evaluar su eventual coraje al ser políticamente incorrecto. Me interesa lo que denota su argumentación.

A partir de la crítica específica a personas que, hipster o no, llaman a salvar animales que podrían morir en el descomunal incendio de Valparaíso, Gumucio intenta convencernos subrepticiamente que todo quien se preocupe en tales circunstancias también por las mascotas estaría indefectiblemente despreciando la vida de otros hombres y mujeres. Que en una situación de catástrofe como la mencionada, donde una mayoría de los esfuerzos son destinados a contener los efectos del fuego sobre los seres humanos y los bienes en riesgo, preocuparse por salvar de las llamas a seres vivos no humanos sería una insensibilidad tremenda. Una falta de humanidad cuestionable.

Bajo tal polaridad, por cierto que suena tremendo. Y aquello me hace recordar un posteo donde una joven se preguntaba, ante la imagen de un bombero rescatando a un gato, si este habría privilegiado salvar a la mascota en desmedro de un ser humano calcinándose. O la lógica simplista de señalar que los cientos de porteños que protegieron a sus animales desatendieron a una persona vulnerable.

Esta matriz argumental, que comparten muchas otras personas por ser educadas bajo tal paradigma, separa al ser humano de la naturaleza, sin llegar a comprender que no solo somos parte de ella sino que nos necesitamos mutuamente. Es la ética de la vida, donde todos los seres vivos y ecosistemas tienen un lugar. No sé si le sonará esto a idealismo de tercera (lo de hipster o no, lo dejo para los analistas de tribus urbanas), pero incluso el racionalismo antropocéntrico reconoce que una naturaleza sana es el hermoso atril donde todas las especies, incluidos nosotros por cierto, podemos componer la sinfonía de la vida.

Es la vulnerabilidad la que debe llamar nuestra atención. La vulnerabilidad de todo ser viviente, que incluye a niños, hombres, mujeres y ancianos del incendio de Valparaíso. A los afectados por el terremoto, a quienes viven en la pobreza, las mujeres discriminadas y a las comunidades indígenas pisoteadas. Y, por cierto, a los animales.

Así lo entendió aquel Francisco de la edad media. Un hombre para quien optar por los pobres no fue contradictorio con hacerlo por sus hermanos menores. Principio que hoy por hoy obliga a la vez a solidarizar con Rafael Gumucio, quien fuera atacado de forma cruel por algunas personas que al parecer no comprendieron en su actuar la profundidad que implica el respeto y el amor por la existencia vital, la empatía con el otro. Se pare este en dos pie o en cuatro peludas patas.

No soy erudito en opinión pública, pero me atrevo a aventurar que si se preguntara a los chilenos y chilenas si consideran a los animales (salvajes o domésticos) como una cosa, la respuesta sería claramente no. Es ese un debate pendiente que merecemos abordar como sociedad.

——————————
Foto: Animat_Chile

TAGS:

Los contenidos publicados en elquintopoder.cl son de exclusiva responsabilidad de sus respectivos autores.
Te invitamos a conocer nuestras  Reglas de Comunidad

Comentarios

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Quedan 1500 carácteres.

#NuevaConstitución

VER TODO
Para la ciudadanía la rotonda sin salidas es como vivir el castigo de Sísifo, destinados a llevar una pesada roca política a la cima de la montaña, solo para verla rodar montaña abajo y volver a repeti ...
+VER MÁS
#Política

De vuelta a la rotonda política

Para la ciudadanía la rotonda sin salidas es como vivir el castigo de Sísifo, destinados a llevar una pesada roca política a la cima de la montaña, solo para verla rodar montaña abajo y volver a repetir el ciclo interminable de esfuerzo y fracaso

Que existe agotamiento en múltiples sectores, difícil es de negar. Y eso incide en la viabilidad política actual. Pero eso no significa que el dilema constitucional esté cerrado
+VER MÁS
#Política

El mito del cierre definitivo del proceso constituyente/constitucional

Que existe agotamiento en múltiples sectores, difícil es de negar. Y eso incide en la viabilidad política actual. Pero eso no significa que el dilema constitucional esté cerrado

A pesar de los obstáculos y desgastes, el compromiso adquirido para modificar la Constitución debe ser respetado y llevado a cabo para reconectar con las expectativas y necesidades del pueblo
+VER MÁS
#Política

¿Nos jodimos todos?

A pesar de los obstáculos y desgastes, el compromiso adquirido para modificar la Constitución debe ser respetado y llevado a cabo para reconectar con las expectativas y necesidades del pueblo

El pueblo de Chile, está hastiado de la reyerta de baja monta, no quiere ver más discusiones bizantinas, alejadas de sus problemas cotidianos. Los chilenos y chilenas favorecen los acuerdos, pero esos no ...
+VER MÁS
#Política

Las lecciones del plebiscito

El pueblo de Chile, está hastiado de la reyerta de baja monta, no quiere ver más discusiones bizantinas, alejadas de sus problemas cotidianos. Los chilenos y chilenas favorecen los acuerdos, pero esos no se han visto por ningún lado

Nuevos

La segregación social y la desigualdad económica exagerada destruye democracias y sociedades y aumenta la delincuencia. Una solución que considerar para construir sociedades prosperas y justas, es limita ...
+VER MÁS
#Sociedad

Cuando el Estado está ausente, la delincuencia se hace presente

¿Qué elementos tiene la alcaldesa para desacreditar nuestro sistema electoral y sus personas, que han dado pruebas de que dichas instancias son una fiesta para la democracia, y sostener que el fraude esta ...
+VER MÁS
#Educación

Cuando no crees en tu propio electorado

Una “tesis” fuerte posible de entrada dice: <los mejores continuadores de un Jacques Derrida, talvez no sean los filósof@s sino los físicos quántico-relativistas>. Veamos… Sabine Hossenfelde ...
+VER MÁS
#Ciencia

Una físico teórica y los “relatos” de la física actual

El Estado no tiene hoy ni los recursos ni las facultades para intervenir en la siderúrgica en tris de cierre. Lo de aumentar la salvaguarda, es un placebo, no va a reducir los costos de producción, ni a h ...
+VER MÁS
#Economía

La CAP es la punta del iceberg

Popular

Para nuestro proyecto político, no existe nada más revolucionario que un objeto concreto y patente que el Estado funciona, permitiendo que jóvenes de clases y medias y medias bajas puedan generar movilid ...
+VER MÁS
#Educación

El Frente Amplio debe valorar la selección en liceos emblemáticos

No se justifica el interés público que exige la constitución, para mantener la concesión minera en Chile a empresas extranjeras. Su sola existencia es contraria al interés nacional
+VER MÁS
#Economía

A 52 años de la Nacionalización de la Gran Minería del Cobre en Chile

1 Acabo de participar en la “Fourth Chilean Conference on Philosophy of Physics”/ IV Conferencia Chilena en Filosofía de la Física, del 11 al 13 de marzo de 2024. Lo escribo en inglés como fue publi ...
+VER MÁS
#Cultura

Consideraciones iniciales de una filosofía de la física actual

Si por estas cosas curiosas de la vida, llegara a prosperar esta operación comercial, enfrente de la angosta vía local Camoens de Vitacura, se habrán reemplazado 6 viviendas ya demolidas por 7 oficinas, ...
+VER MÁS
#Ciudad

En Chile ''los de arriba'' mandan a todo evento