Comienzan nuevos desafíos y logros para nuestros profesores y estudiantes en un año clave para la educación pública chilena. Por muchos el 2016 ha sido denominado el año de la educación pública en la que profesores y estudiantes iniciamos el camino al conocimiento, porque la educación es una experiencia recíproca de aprendizaje.
Saludar a todas las profesoras y profesores que, iniciando este año lectivo continúan con nuevas y mejores expectativas su proceso educativo, también quiero destacar que las condiciones laborales de los profesionales de la educación son claves para mejorar la enseñanza aprendizaje de nuestros estudiantes.La idea es contribuir con el objetivo de recuperar la educación pública. No somos neutros, pero tampoco somos meros observadores. Como protagonistas de estos cambios, sumamos nuestros propósitos y objetivos a un bien común para el presente y el futuro.
Estamos construyendo un nuevo lugar con nuevas y mejores razones para pensar en recuperar la educación pública y cambiar los sistemas educativos heredados de la dictadura. Sin duda resta mucho aún por alcanzar el objetivo, pero avanzamos y de la misma forma que apoyamos, exigimos igualdad al derecho a la educación.
Para el proyecto de ley de nueva educación pública o desmunicipalización, por ejemplo, hemos considerado prioridades, de las cuales indicamos que el sistema de financiamiento debe ser aporte directo del Estado (aporte basal) y no por asistencia promedio o voucher, que genera más desigualdad entre los colegios, porque es evidente que en los establecimientos de sectores más pobres, el ausentismo escolar y la deserción son más proclives a manifestarse por las difíciles condiciones de vida de los escolares.
Este año escolar que se inicia, condena la discriminación de cualquier tipo, entrega educación superior gratuita a 170 mil estudiantes y viene acompañado de importantes cambios en su estructura superior armando un camino en el que confluirá con los estudiantes y la sociedad en su conjunto.
Estos cambios aún son rechazados por los sectores más conservadores y refractarios que detestan el derecho a la igualdad en la educación. Mejorar las condiciones de enseñanza y de aprendizaje es similar a establecer puentes concretos a la igualdad de oportunidades. Nosotros sumamos nuestro propósito desde las convicciones que nos motivan por siempre.
La eliminación del lucro en la educación en la formación continua de los colegas, no es sólo una situación ideológica, como planteaban algunos Senadores, sino que también es una fuente de agobio laboral que sufren profesores/as. Así como la evaluación docente terminó siendo una fuente de estrés, debemos evitar nuevas formas que obstaculicen el desarrollo de la formación permanente de los profesores.
La idea es contribuir con el objetivo de recuperar la educación pública. No somos neutros, pero tampoco somos meros observadores. Como protagonistas de estos cambios, sumamos nuestros propósitos y objetivos a un bien común para el presente y el futuro.
Finalmente estimadas y estimados colegas, quiero desearle a cada uno de ustedes éxito en este nuevo año escolar 2016.
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