Hace algunas semanas atrás, el Gobierno lanzó el Programa Nacional de Formación Ciudadana con el fin de «buscar formar ciudadanos activos, responsables, participativos, comprometidos con su rol en la sociedad, conviviendo en la diferencia y valorando la diversidad«. Claramente, para todos es muy importante el desarrollo y fortalecimiento de nuestra democracia, como asimismo la construcción de ciudadanos republicanos que sean motores de cambio, reflexivos, críticos y líderes de un futuro social e inclusivo para todos y todas.
Creo que en eso, todos coincidimos. Sin embargo, cuando uno revisa y analiza los elementos del mencionado programa, uno se pregunta si realmente es una buena idea, en el sentido de establecer un elemento más al currículo nacional, y que los colegios y escuelas deban contar con un programa propio en esta línea, que se adscriba a estos principios.Dejar en libertad a los establecimientos, es no asumir una responsabilidad clave en la República.
Veamos primero, la pertenencia de este programa. Nuestro sistema educativo está emplazado en una visión paradigmática propia, tal como establecen Habermas, Grundy y Pascual –Teoría de Intereses Constitutivos– que corresponde a una visión positivista, donde los valores y principios no importan, solo la visión distante y alejada del objeto de estudio, estudiado por el método científico-cuantitativo, y que propicia el conductismo. De este, se empalma la racionalidad técnica, la cual tiene por centro el dato medible, el progreso observable, cuantificado y que los sujetos se adapten al mundo en que viven. No hay crítica, reflexión ni cuestionamiento. Acá importan los test estandarizados (SIMCE, PSU) como elementos centrales, los niveles de progreso y las escalas métricas.
A partir de lo anterior, que sin duda alguna, no cambiará con la Reforma Educacional, no tiene el menor sentido la instalación de un programa de formación ciudadana, ya que el propio sistema escolar carece de dichos valores y principios ciudadanos. No pueden crearse por decreto o norma, no son parte de la educación existente; es decir, no son parte del «ethos» de la educación chilena. No descartemos además, que exista un «SIMCE» de Educación Cívica en el futuro.
Finalmente, la otra pregunta es: ¿el Estado quiere formar ciudadanos republicanos? Porque si fuese así, entonces, también va en contradicción con el Estado que tenemos hoy en día, que desarrolla y crea «consumidores», no sujetos de derecho. Además, se cae en el mismo error que Carrera Docente, ¿por qué el Estado no decide qué valores y principios quiere establecer en la Educación? Dejar en libertad a los establecimientos, es no asumir una responsabilidad clave en la República.
Es importante hacerse estas preguntas, no quedarse con el eslogan o el discurso de las autoridades, porque antes de implementar un programa así, ni siquiera sabemos qué Educación queremos para nuestro país.
Comentarios
27 de agosto
FUNDAMENTAL REPONER LA ASIGNATURA DE EDUCACIÓN CÍVICA QUE EXISTIÓ EN EL PASADO CON LOS CAMBIOS QUE SEAN NECESARIOS DE MODO DE FORMAR CIUDADANOS APTOS PARA LA SOCIEDAD , NO HAY DUDA ALGUNA. HAY MUCHA IGNORANCIA SOBRE EL TEMA DE SUERTE QUE SERÍA MUY RECOMENDABLE OTORGAR LOS CONOCIMIENTOS NECESARIOS PARA CONSTRUIR UNA SOCIEDAD SANA ROBUSTA Y FUERTE .
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27 de agosto
tu dices —«el propio sistema escolar carece de dichos valores y principios ciudadanos» entre otras aseveraciones. Realemente encontre enredado el articulo y solo crea confusion ya que deja en manos de «ciertos entes» el como hacerlo y lo peor, para medir resultados que no se sabe finalmente de que.
La Educacion Civica es simplemente eso: educar a ser ciudadanos. Demostrar delimpacto que cada uno tiene en las acciones que en futuro tome, para si mismo, para la comunidad, para el futuro. Porque tiene que ser complicado y apelar a sociologos y filososfos sociales cuando se trata de que los niños valoren el significado de intervenir con respeto con sus pares, de entablar conversaciones de valor entre ellos, de entender el significado de deberes y derechos y de sentir orgullo de haber sido ecuanimes y hmanistas en sus argumentos? Muchos jamas llegaran a sentirse plenamente satisfechos de como se manejan las cosas, pero si tendran una mente abierta para seguir lidernado con ideas que se forman a temprana edad. Para eso no se necesitan ni Ministros, ni tecnico ni sociologos de levada intelectualidad. Se requiere de hombres honestos, educados y de alto espiritu patriotico y eso se encuentra entre el profesorado maduro de nuestro pais.
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