Persecución policial

Robo un auto, un policía me ve. Ordena detenerme, yo no lo hago. Por esto empieza una persecución. En mi escape atropello a un peatón, choco con 3 automóviles. Conduzco por calles contra el tránsito, no respeto la señalética, nunca bajo de los 120 km/h. Atropello a otro peatón que cruza un semáforo. Entro a un parque donde hay niños, peatones y ciclistas, no bajo mi velocidad: lo importante es escapar. Noto que en mi persecución una patrulla atropella a un peatón. Para él lo importante es atraparme, y lo logra. Conté 8 muertes en la persecución. Poco después salgo en libertad.

---

Es necesario que se racionalicen estos procedimientos y plantear las mejoras que han tenido éxito a nivel internacional.

Este relato es del juego Grand Theft Auto (GTA), pero podría ser sacado de alguna experiencia en las calles de nuestro país. Quizás la comparación no sea la más apropiada. No es justo para familiares de víctimas de accidentes de transito por persecuciones, que ya son bastantes, comparar a sus seres queridos con un conjunto de pixeles. Pero aún así, podría ser el relato de una persecución policial en nuestro país. La mentalidad del perseguido es escapar a cualquier costo, la del persecutor es similar: Atrapar a cualquier costo. La labor de Carabineros de Chile en este sentido es bien cuestionable.

Quizás sea por el sensacionalismo de nuestra televisión, pero me da la impresión de que en nuestro país cada vez son más comunes las persecuciones policiales. No puedo demostrar esta impresión, pues como me responde vía «transparencia», la institución que realiza estas persecuciones, Carabineros de Chile, no recolecta datos ni mucho menos hace un análisis sobre ellas. Esto es particularmente grave, pues en las persecuciones policiales se pone en riesgo a todas las personas que transitan por la caótica ruta de la persecución. Un aumento de las persecuciones, inmediatamente pone en riesgo a más personas, por consiguiente hay más víctimas de accidentes de tránsito por esta causa. Más víctimas que son responsabilidad de Carabineros.

Otra consecuencia de la ausencia de datos es que también impide realizar cualquier análisis de las causas de las persecuciones, por lo que Carabineros no puede analizar formas para reducirlas.

Pero hay un problema mayor a la ausencia de datos: no existe un procedimiento para la persecución policial. Es decir, se puede iniciar una persecución policial por cualquier delito, imagino que incluso puede ser por la sospecha de algún delito. No hay ninguna guía sobre qué se puede hacer y qué no, ¿Una patrulla puede andar por el parque donde juegan niños en una persecución? Si producto de la persecución se atropella a una persona, ¿Hay que socorrer a la víctima de la persecución o continuarla? Una persecución policial pone en peligro a muchas personas como para dejar a discreción del carabinero su actuar en ésta.

Es necesario que se racionalicen estos procedimientos y plantear las mejoras que han tenido éxito a nivel internacional. Por ejemplo en varios países desarrollados, ha tenido bastante éxito que las patrullas disparen GPS (geolocalizadores) a los automóviles que quieren perseguir. De esta forma ya no es un trabajo físico de persecución, si no que es un trabajo de inteligencia, que reduce drásticamente los riesgos. Mientras ellos hacen eso, nosotros compramos súper patrullas Dodge, que andan más rápido, para que las persecuciones sean más peligrosas.

Hay que ser claros, las persecuciones policiales suelen ser necesarias, el problema es que siendo uno de los más delicados procedimientos, que más accidentes puede causar la acción de Carabineros, al día de hoy carece de toda racionalidad, se pone en peligro a la población, no se determinan los riesgos y las consecuencias de esto son las víctimas de las persecuciones. Que aunque sean atropelladas por el perseguido, son víctimas directas del actuar de Carabineros.